El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, declaró este 30 de septiembre que es necesario recomendar el uso de la fuerza contra Israel conforme a una facultad reflejada en la Resolución 377 de la Asamblea General de las Naciones Unidas, también conocida como Unión Pro Paz, aprobada en 1950.
Según la resolución, si el Consejo de Seguridad de la ONU, por falta de unanimidad entre sus miembros permanentes, deja de cumplir con su responsabilidad de mantener la paz y la seguridad internacionales, la Asamblea General examinará inmediatamente el asunto, con miras a dirigir a los miembros recomendaciones apropiadas para la adopción de medidas colectivas, incluido el uso de fuerzas armadas en caso de ser necesario.
“Si el Consejo de Seguridad no muestra la voluntad necesaria, la facultad de la Asamblea General de la ONU de recomendar el uso de la fuerza, como en la resolución Unión Pro Paz de 1950, debe activarse con rapidez”, dijo Erdogan en su discurso a la nación tras una reunión del Gabinete.
Oriente Próximo enfrenta una tensa situación debido a las hostilidades entre Israel y la milicia chií libanesa Hizbulá y los continuos bombardeos israelíes a distintas áreas del Líbano, que desde el 16 de septiembre se han cobrado más de 1.000 vidas y han dejado miles de heridos y desplazados, según datos oficiales libaneses.
Las acciones de ambos bandos han ido escalando. Israel ha eliminado a decenas de altos cargos de Hizbulá, incluido su líder, Hasán Nasralá, en los últimos dos meses, y se teme que el conflicto pueda convertirse en una guerra abierta o, incluso, una regional.